La República Dominicana continúa afianzándose como un actor clave en el mercado global de dispositivos médicos, consolidando su posición como líder en la región de Centroamérica y el Caribe. En registros oficiales reposan las cifras del 2023, donde las exportaciones de dispositivos médicos desde las Zonas Francas dominicanas alcanzaron los 2,490 millones de dólares. Esto representa más del 31 % del valor total de embarques desde estas áreas.
Esta cifra no solo subraya la relevancia del sector, sino que también refleja la capacidad del país para competir en mercados internacionales altamente exigentes.
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Según Luis José Bonilla Bojos, presidente de la Asociación Dominicana de Zonas Francas (Adozona), 40 empresas dedicadas a la manufactura de dispositivos médicos generan actualmente 32,358 empleos. De estos el 67.6 % son ocupados por mujeres. Esto no solo resalta el rol del sector en la creación de empleo, sino que también evidencia su impacto en la inclusión de género y el desarrollo socioeconómico del país.
Además, siete de las 20 principales multinacionales del sector ya operan en territorio dominicano, con planes continuos de expansión y mejoras en sus procesos productivos. Este compromiso refuerza la confianza en la capacidad manufacturera local y en la estabilidad del entorno económico del país.
La colaboración entre la Dirección General de Aduanas (DGA) y la Cámara Americana de Comercio (Amchamdr) ha permitido la presentación del «Estudio del Segmento del Hub», que destaca los avances logísticos y de manufactura en la República Dominicana. Este informe subraya cómo la especialización en el ensamblaje de dispositivos médicos ha permitido al país consolidar una mano de obra altamente capacitada, capaz de realizar tareas complejas a costos competitivos.
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La producción local incluye dispositivos de alta tecnología, como: catéteres, equipos de transfusión y terapia celular, dispositivos de neurología especializada e instrumentos de acceso cardiovascular. Esta diversidad no solo impulsa la competitividad, sino que también abre nuevas oportunidades para satisfacer la creciente demanda de equipos médicos en sectores como la farmacéutica, alta tecnología y telecomunicaciones.
La mejora constante en la infraestructura portuaria y aeroportuaria ha posicionado al país como un nodo logístico estratégico en la región. Según Daniel Peña, subdirector de Tecnología de la DGA, el país ya maneja el 70 % de las toneladas de dispositivos médicos intercambiados en Centroamérica y Colombia, consolidándose como un socio clave en el comercio global. Las conexiones con Europa, América del Norte y América del Sur fortalecen aún más esta posición. Abriendo de este modo puertas para establecer al país como un hub multimodal para el comercio internacional.
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Pese al éxito, persisten desafíos como la necesidad de formar más personal cualificado para roles operativos. El fortalecimiento de la colaboración entre los sectores público y privado será esencial para garantizar la sostenibilidad del crecimiento y la competitividad en el futuro.
La República Dominicana se perfila no solo como un líder regional, sino también como un modelo global de cómo la innovación. La inversión en infraestructura y la especialización pueden transformar un país en un referente en el sector de dispositivos médicos.
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